Sentada, con la gripa tratando de joderme a toda costa, mientras mi mente viaja por mi desconocido o no tanto túnel de la imaginación, buscando palabras que rimen o tal vez sólo compaginen. Alguno que otro letrero sirve de distractor y a veces hasta de inspirador. Pero al final de cuentas sigo aquí, y tú estás a mi lado, sonriendo y cantándole a la vida. Entonces el túnel se disuelve y me devuelve al lugar en donde la imaginación está demás porque lo que he de pensar que podría hacerme aun más que feliz, está ya junto a mí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario